Hace un tiempo os hablé en esta misma sección de cómo calcular de una forma sencilla las cerdas nodrizas que necesitábamos cada día en nuestras granjas. Seguimos usando ese sistema, pero también estamos tratando de reducir el número de estas nodrizas dado el importante espacio que necesitamos para ellas en las maternidades y el coste que supone.
Estamos usando dos trucos muy sencillos, que nos están ayudando a poder dejar más lechones en cada cerda y por lo tanto reducir este número de nodrizas:
1. Compartir madres
El sistema consiste en quitar los separadores que dan al pasillo y abrir entre cuatro y cinco parideras (ver foto) para que los lechones puedan moverse de una a otra. Las jaulas de las cerdas quedarán cerradas y únicamente los lechones, tendrán esa libertad para buscar su hueco y poder tetar. Sabemos que cuanto más grandes son los grupos, las jerarquías que se establecen en ellos son más suaves y por lo tanto los lechones más pequeños tendrán más opciones para alimentarse aunque tengamos camadas numerosas.
Parideras abiertas para que los lechones puedan moverse de una a otra.
Podemos observar cómo mientras una cerda está de pie, otras están dando de mamar.
2. Alternar leche materna y leche artificial
El sistema consiste en adecuar la paridera para poder partir la camada en dos grupos de tamaño variable. El día del parto hacemos un encalostramiento secuencial alternando los grupos cada 1,5 horas de forma que nos aseguramos que todos los lechones se encalostran. A partir del segundo día, dividimos la paridera de forma que tengamos en ambos lados un foco de calor. En uno de los lados está la cerda y por lo tanto los lechones se amamantan de forma natural. En el otro, pondremos un sistema de leche artificial para que puedan beber.
Por cuestión de horarios no es posible alternar los grupos cada doce horas. Lo que hacemos entonces es dejar un grupo con la madre, todo el tiempo que estamos nosotros en la granja trabajando y cambiarlo cuando nos vamos, para que el resto del día lo pasen con la leche artificial y viceversa. El tamaño de cada grupo no tiene por qué ser igual y lo podemos decidir en función del número de lechones que tengamos, del tamaño de los mismos y de las tetas funcionales de la cerda. En cualquier caso nunca dejaremos menos de 10 lechones en el grupo que se queda con la cerda, por lo tanto habrá lechones que siempre estarán con esta y nunca con leche artificial.
Sistema muy casero (mejorable) para lactación secuencial. Lo ideal si decidimos trabajar de esta manera
sería instalar en algunas parideras bebederos especiales para leche artificial colocados en el sitio idóneo.